Paula Delgado

“Creo que la excelencia académica de la UM no está solo en los contenidos de los cursos y en la calidad de los profesores, sino también en el “modo de trabajo” que te inculcan: el de tratar de ser lo más perfeccionista posible con el resultado del trabajo, cuestionar siempre cómo podría dejarlo mejor”
Paula Delgado

Paula Delgado, egresada de la carrera Traducción en la Facultad de Humanidades (FHUM) de la Universidad de Montevideo (UM) se graduó de la UM hace sólo cuatro meses y, con empeño y determinación, logró ser aceptada para una pasantía desafiante pero prometedora que, como cuenta, fue una gran satisfacción. Delgado reconoce que su carrera tiene diversas ramas y aportunidades. Hoy trabaja como freelance, apuntando más que nada al mercado internacional.

A continuación,  la entrevista realizada a Delgado.

¿Cómo sentís que te preparó la UM en tu desarrollo como profesional?

Excelentemente. Creo que la excelencia académica de la UM no está solo en los contenidos de los cursos y en la calidad de los profesores, sino también en el “modo de trabajo” que te inculcan: el de tratar de ser lo más perfeccionista posible con el resultado del trabajo, cuestionar siempre cómo podría dejarlo mejor, buscar siempre nuevos métodos o tecnologías para volvernos más eficientes. Aunque esto es algo que me enseñaron en mi familia primero, la UM me lo terminó de consolidar. Y me aportó las herramientas particularmente aplicables a esta profesión para poder hacerlo.

¿En qué consistía la pasantía? ¿Cuánto tiempo estuviste en París? 

La pasantía era por 6 meses. Fue en la Cámara de Comercio Internacional, mejor conocida por su Corte Internacional de Arbitraje o también por los Incoterms®. Tuve la suerte de caer en un momento en el que el volumen de trabajo era desbordante y por lo tanto fueron delegándome tareas que no eran propias de un pasante, sino de mayor responsabilidad. Mi trabajo era, entre otras tareas logísticas de organización de conferencias y de contacto con las distintas partes involucradas, traducir y revisar toda la documentación relativa a estas conferencias de la ICC, principalmente documentos de arbitraje y ADR, contratos internacionales de construcción y comerciales, entre otras ramas del Derecho. Las traducciones eran del inglés al español y portugués. Fue un trabajo súper desafiante pero muy gratificante al final, cuando tuvo un buen resultado. 

Cuando estudiabas, ¿te veías en el lugar donde estás hoy?

No, para nada. En realidad no tenía ni idea de qué camino iba a seguir laboralmente. Este trabajo en París yo lo súper busqué, me moví mucho para encontrarlo. Pero no tenía idea de qué puertas podían abrirse a partir de él. Creo que en esta carrera uno puede elegir a qué nicho quiere apuntar, pero hasta cierto punto, porque después, en base a los trabajos que van llegando, ya sea por recomendación o por oportunidades que surgen y uno toma, uno va haciéndose un perfil particular y especializándose en ciertas áreas más que otras. Actualmente, como en cualquier trabajo freelance, no estoy en un lugar estable, me recibí hace solo 4 meses y aunque tuve varios trabajos de traducción buenos, no tengo nada garantizado. Me quedan muchas fichas más para mover.  

¿Qué es lo que más recordás de tu paso por la UM?

Siempre me acuerdo del buen ambiente que había allí, de la actitud alegre de los que trabajan en la universidad, como los de bedelía o los de recepción, que siempre te recibían saludándote enérgicamente y con buena cara. Así ya entrás a la jornada de clase con mejor predisposición.    

¿Qué objetivos tenés, como profesional, a corto y largo plazo?

En estos 4 meses desde que me recibí pasé por mil objetivos distintos. Y poco a poco fui dándome cuenta de qué es lo que quiero. Actualmente mi trabajo ideal sería poder trabajar como traductora independiente, tener una cartera de clientes que me permitiera un mínimo ingreso fijo mensual y después uno variable. Apunto más al mercado internacional que al nacional. Igualmente, establecer eso lleva un tiempo, pero confío en que con perseverancia, paciencia, y sabiendo identificar oportunidades y tomarlas, puede lograrse. Por un momento tenía en mente trabajar en un organismo internacional, pero decidí que a esta altura es mejor no poner todos los huevos en una misma canasta.

Entrevista realizada en julio de 2015.