Un grupo de diecisiete docentes de la Universidad de Montevideo se formó en competencias digitales para reafirmar, intercambiar y adquirir nuevos conocimientos, a través de un curso virtual que diseñó y dictó la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), institución que funciona 100% online.

Los docentes de la UM accedieron a la capacitación gracias al acuerdo que mantiene con la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), socia de UNIR en esta iniciativa que capacita a profesores de la educación superior. En Uruguay, la Universidad de Montevideo es la única privada con un convenio con la OEI.  

La UM suscribió a esta propuesta para seguir capacitando docentes con diversas referencias locales e internacionales, y así enriquecer los cursos virtuales e híbridos (virtual-presencial) en la Universidad. El programa, que reúne a cientos de docentes latinoamericanos, incluye un módulo de Didáctica en línea y otro en Elaboración de contenidos digitales, ideal para profesores que emplean ambos modelos de formación.

“Creo que la UM ha demostrado compromiso por apoyar a los docentes en la formación de este tipo de competencias. El programa es interesante porque permite a los docentes realizar un recorrido por las distintas habilidades que deberá desarrollar como docente en entornos online, las herramientas con las que hoy cuenta y metodologías docentes eficaces en educación en esta modalidad. A su vez, los ayuda a conocer la realidad en la que desarrollará su labor formativa y de acompañamiento a los estudiantes”, comentó la Ing. Elizabeth Scherschener, participante por parte del curso por parte de la UM.

Continuidad del esfuerzo para una educación previsora

Desde marzo, a través del equipo de Sistemas y Soporte, así como del Espacio de Docencia Universitaria, la UM brindó apoyo a todos sus docentes para llevar adelante una necesaria transición de los cursos presenciales a la virtualidad.

Ante la presencia de coronavirus en Uruguay, la Universidad abrió espacios de consultas e intercambios a través de talleres y foros, que sirvieron de capacitación técnica para aprovechar al cien por ciento las herramientas digitales de la institución. Además, algunos talleres sirvieron de retroalimentación y mejoramiento de experiencias pedagógicas en los distintos formatos, gracias al intercambio de buenas prácticas locales e internacionales de los docentes.

Puesto en marcha el plan de adaptación a lo virtual, la Universidad se concentró en atender nuevas necesidades pedagógicas y ajustar modalidades, teniendo en cuenta dichas buenas prácticas y los resultados de una serie de encuestas realizadas a docentes y alumnos, muchas veces segmentadas por área académica.

“Seguimos con mucha energía y responsabilidad esta tarea de formar a los líderes del futuro. Nos comprometemos a mantener los planes académicos y asegurarnos de que los estudiantes no sufran ningún atraso en sus carreras”, comentaba el rector de la UM, Dr. Juan Manuel Gutiérrez Carrau, en las primeras semanas de adaptación de cursos.

El viernes 20 de noviembre culminó una etapa crucial: terminaron las clases híbridas y virtuales, y también se lanzó una encuesta para conocer la opinión de los alumnos sobre la experiencia general de este año. “Vemos un resultado general positivo frente a la gestión durante la pandemia, aunque aún estamos evaluando resultados y viendo posibilidades de mejora para el futuro, según evolucione la emergencia sanitaria”, comentó el Dr. Enrique Etchevarren, secretario académico de la UM. “El compromiso de los docentes y su capacidad de adaptación fue fundamental para cumplir con los planes académicos sin sufrir atrasos. También fue importante el apoyo técnico de parte de las bedelías y servicios de la Universidad, así como la buena disposición de los estudiantes frente a los desafíos que propuso la pandemia en la institución y en sus casas. La crisis nos ha enseñado mucho a todos y se ha convertido en una oportunidad para alcanzar nuevos niveles de excelencia en cada uno de los cursos”, agregó.