Serrana Aguirregaray llegó en 2018 a la UM desde Artigas. Aunque comenzó las clases en la Facultad de Ingeniería de la UM (FIUM) pensando en seguir Ingeniería Telemática, en primer año descubrió que “lo que más disfrutaba era programar”. “Luego de hablar con mi asesora y mis padres, que siempre apoyaron mis decisiones, me cambié a Ingeniería en Informática. Fue una de las mejores decisiones que tomé”, contó. Actualmente trabaja en Montevideo Labs, en donde ha tenido experiencia con machine learning y data science. Contó que este semestre cursó “Quantum computing” y descubrió otro horizonte que quiere “seguir explorando”.

A principios de este año, ella y sus compañeros recibieron un mail de Rafael Sotelo, el coordinador de su carrera, con información sobre una pasantía de verano en Facebook. Se postuló y tuvo una serie de entrevistas, hasta la fase final. Luego de eso, comenzó a trabajar en Montevideo Labs y desde Facebook se comunicaron con ella para ofrecerle un lugar en la preselección de un mentorship con ingenieros de esa red social: “Era una gran oportunidad y la acepté”.

La competencia para ser admitida en la capacitación —en la que participaron estudiantes de toda América Latina— consistió en una serie de actividades de programación en una plataforma de Facebook con tiempo limitado. La mayoría de los ejercicios consistía en leer la letra de un problema y crear un algoritmo para solucionarlo. En otros casos, debía redactar una query, es decir, una petición precisa para obtener información en una base de datos o sistema de información. Finalmente, fue una de las 50 elegidas para cursar la mentoría.

Los responsables de Facebook dividieron a los estudiantes en equipos de a pares —ella participa junto a un joven chileno— y, en su caso, les asignaron dos mentores. El proceso consiste en tres grandes módulos de estructuras de datos. En cada uno de ellos, los mentores les proporcionan información para estudiar y les asignan ejercicios de LeetCode, una plataforma para aprender a programar. Además, cada quince días mantienen una videollamada con los mentores, quienes les enseñan cómo resolver este tipo de problemas y a comunicar el proceso de razonamiento. Para practicar, resuelven problemas en vivo frente al equipo.

“Lo que más destaco es el grupo humano que se formó. Tanto mis compañeros, como los mentores son grandes personas”, relató Serrana. Agregó que, desde el punto de vista técnico, el programa la ayudó a “ver otras maneras de solucionar problemas y a comunicar lo que pienso de manera más precisa y clara”. «Además, está siendo una experiencia muy divertida. “Análisis y diseño de algoritmos” fue una de mis materias favoritas y me alegra seguir estudiándolos».

En relación a la carrera que cursa, indicó: “Me fascina lo amplia que es, cuan esencial es para el mundo de hoy, la cantidad de información y herramientas que hay en Internet y lo fácil que es empezar. Te podés dedicar a temas desde el desarrollo web hasta la computación cuántica y lo único que necesitas para comenzar es una computadora y conexión a Internet. Me gusta explorar todas las áreas y sé que con esta carrera estoy siempre a un click de distancia de lo que quiera aprender”.