Michelini entre San José y Soriano. En el segundo piso de la redacción del diario El País se encuentra Faustina Bartaburu, que edita un video. La actual integrante del equipo multimedia del diario que en 2018 cumplió cien años contó que llegó de Salto en 2013 para comenzar Arquitectura. Sin embargo, después de un año decidió cambiarse a Comunicación. Empezó las clases en la UM y, aunque al principio le atraía la Publicidad, a lo largo de la carrera descubrió que quería dedicarse al periodismo. Hace unos días, se graduó junto a sus compañeros de generación. Con ocasión del Día del Periodista, habla sobre su profesión y el trayecto recorrido:

¿Cómo definirías al periodismo y cuáles te parece que son sus desafíos hoy?

Buscar la verdad y poder transmitirla. En el fondo, se trata de contar historias, como siempre nos dijeron en la UM. Creo que algunos desafíos siguen siendo los mismos que tiene desde que nació: encontrar la verdad, poder transmitirla de la mejor manera y con objetividad. Pero a esto se le suman nuevos desafíos que tienen que ver con todo lo digital: hay nuevas herramientas para contar y más lugares de los que sacar insumos, pero al mismo tiempo hay que chequear más y buscar nuevas maneras de transmitir.

¿Cómo surgió la oportunidad de comenzar a trabajar en El País como periodista multimedia? ¿En qué consiste tu trabajo?

En El País empecé a trabajar en marzo de este año. Florencia Traibel, mi editora, había sido mi profesora en la UM y me ofreció trabajar en el equipo de Multimedia. Lo que hacemos es contar historias en distintos formatos digitales: video, audio, etc. Algunas notas las trabajamos en conjunto con otras secciones del diario y otras las producimos de cero desde Multimedia.

El País acaba de cumplir 100 años. ¿Qué significa para ti trabajar en un medio que ha sido testigo del último centenar del país?

Es lindo estar acá. Que haya cumplido 100 años significa que es un lugar que ha podido reinventarse en las distintas etapas y seguir progresando y, al mismo tiempo, es una muestra de que el periodismo está más que vigente.

Como Proyecto final de carrera, participaste en el reportaje multimedia Doble Reja. ¿Cómo fue esta experiencia y de qué forma te ayudó a crecer como periodista?

Me enseño mucho: a trabajar en equipo, a buscar alternativas para contar cuando la realidad no te permite hacerlo de la forma que tenías pensado, a lidiar con la burocracia, a saber esperar al momento adecuado para actuar, a repensar la idea cuando algo no salió como querías y a volver a editar las veces que sea necesario para contar la historia de la mejor manera.

¿Qué le dirías a un estudiante de liceo que se plantea dedicarse al periodismo?

Creo que es una decisión muy personal. A mí me encanta lo que hago, me encanta poder estar en contacto con la gente, escuchar y poder transmitir historias que de otra forma nunca hubiera conocido. También es cierto que la profesión tiene cosas negativas, como todo, y hay que aprender a sacrificar algunas cosas: por ejemplo, trabajar algunos fines de semana. Pero sí es lo que te gusta, vale la pena.